Hemos reinventado el refrán: "A mal tiempo, buenos son aromas". Pero, ¿cómo funciona esto?
Hablando de dichos, hay uno que dice 'en Abril, aguas mil', y por lo que estamos viviendo estos días vemos que el refrán no se hizo popular en vano, realmente es que no le falta razón. España entera está sufriendo estos días condiciones meteorológicas propias del más crudo invierno y es que el cuarto mes del año suele venir con tiempo inestable: lluvia, frío, vientos... Llega la primavera pero para que sólo en la teoría.
¿De qué manera puedes hacer frente a este tiempo gris? ¿Cómo puedes mejorar tu estado de ánimo cuando el clima no acompaña? Aromas de Andalucía te da la solución: a mal tiempo, buenos olores.
Está demostrado que advertir determinados olores libera las conocidas como hormonas de la felicidad: Endofrinas, Dopamina y Serotonina. Lo más común es que estos olores que provocan satisfacción, serenidad y alegría suele deberse a su estrecha relación con el recuerdo de un determinado momento, situación, persona...
Una relación emotivo- sensorial que en la mayor parte de los casos es irracional, siendo el propio individuo incapaz de dar una explicación lógica a esa sensación.
Lo que te proponemos desde Aromas de Andalucía es un ejercicio de memoria. Párate un momento y piensa: ¿qué aromas y olores te hacen a ti sentir especialmente bien? ¿Te viene alguno rápido a la cabeza? Si no es así, no te preocupes, a continuación te enumeramos algunos de los olores que más comúnmente llaman la atención y suponen una satisfacción para las personas.
PROTECTOR SOLAR: Las fragancias "estándar" que los productos foto protectores suelen añadir se reconocen con mucha facilidad. Un aroma dulce que se asocia a los cálidos días de verano, vacaciones y tiempo libre. Un recuerdo que inevitablemente evoca la felicidad.
HIERBA RECIÉN CORTADA: El olor que desprende el césped húmedo, fresco y recién cortado es otro de los aromas satisfactorios de esta lista. La composición natural de la hierba en combinación con la humedad, un olor de por si característico, le dan un toque químico que lo hace placentero, relajante y en definitiva especial para muchos.
OLOR A BEBÉ: Un niño de poco tiempo de vida. No hay que buscar mucha más explicación, aparte de la alegría que evidentemente supone en una familia el nacimiento de un nuevo miembro. El aroma natural del bebé que está empezando a vivir sumado a los productos típicos que se utilizan para su cuidado tienen como resultado que el denominado como 'olor a bebé' sea tan delicioso que incluso se ha establecido como habitual perfume en cosmética y ambientación para el hogar.
PAN RECIÉN HECHO: Una auténtica delicia, es indiscutible. Los expertos en marketing olfativo determinan que este olor evoca recuerdos relacionados con familiares y con momentos de la infancia, provocando un estado de amabilidad con su entorno, incluso cuando estas personas son desconocidas. ¿Será por eso que la gente en las panaderías siempre tienen una sonrisa en la cara?
LA GASOLINA: SI. El olor a gasolina y en general el aura que se respira en gasolineras y garajes es definido por muchos como su favorito. Puede resultar curioso, pero es cierto. A pesar de proceder del petróleo y de su color amarillento, la gasolina provoca en el sistema límbico, el cual regula las emociones en el cerebro, determinadas percepciones positivas derivadas de situaciones de nostalgia o momentos de felicidad. Raro, pero cierto.
Estos son sólo algunas fragancias que hacen las delicias de la mayoría. ¿Te han ayudado a recordar cuál es el que más te gusta a ti? Queremos saberlo.
Deja tu comentario contándonos qué olor te fascina y no puedes dejar de recordar cuando te topas con él.